Alberto González González.-
Hablar de Aznar y Ayuso es lo mismo que hablar de Milei, Trump, Bolsonaro y Putin, sí, también de Putin, tanto Aznar como Ayuso son lo más parecido a esos personajes, aunque uno y otra lleven siempre la palabra libertad en la boca, será su libertad, o lo que uno y otra entienden por libertad, pero parece que no sea la libertad de los demás, salvo para tomarse unas cañas, lo demás para esta gente no existe.
Lamentable que alguien que ha sido presidente de España, llegue a lo que está llegando, no tengo conocimiento de algo que hiciera en su mandato en favor de la mayoría de los españoles. Recuerdo que en la oposición siempre tenía una frase: “váyase señor González” y cuando llegó a presidente decía, “España va bien”, no sabemos si para él y los que estaban a su alrededor, medio gobierno en la cárcel o pringado, pero para España, su legado dejó mucho que desear, habría que mirar si hubo algún legado positivo, porque fue lo más negativo que ha tenido España en democracia.
Aznar, el que comentaba: “ que nadie le tenía que decir lo que debía beber y como conducir después”, una persona a la que no parece que le interesen los derechos humanos, esto ya le viene desde que nos metió mintiendo en la guerra de Irak, y las consecuencias que llegaron después; 192 muertos y más de 2.000 heridos aquel fatídico 11 de marzo, que solo le preocupaba si el PP perdía las elecciones por ello, de ahí el empeño en llamar a los medios diciendo que era ETA, algo que demostró la justicia que era mentira.
No solo por la guerra de Irak, es una persona provocadora que le interesa muy poco la convivencia en España, y así hablaba: “quien tenga que decir que diga”, “quien tenga que actuar que actúe”, todo para ir contra la amnistía, provocación tras provocación, es a lo que se dedica, y no digamos como se expresa en el conflicto de Israel y Palestina, no tiene desperdicio, parece que los derechos humanos le importan un comino, es como Trump, Milei, Bolsonaro y Putin, un fascista en toda regla, que apoya un genocidio que ya hasta la ONU está en esos términos.
Habría sido interesante, que Aznar hubiera tenido que responder ante la Corte Penal Internacional, juzgado por todo esto, un expresidente sin escrúpulos, que se pasea por los medios diciendo verdaderas barbaridades, y que nunca ha sido capaz de hacer lo que hicieron los otros dos colegas del trio de los Azores, él no, está por encima del bien y del mal, y no va a hacer reflexión alguna.
¿ Ayuso? tres cuartos de los mismo que Aznar, ambos están relacionados con temas muy sensibles que causaron muchos muertos, y en el caso de Ayuso hablamos de las residencias de la Comunidad de Madrid, que según la comisión de la verdad y sus conclusiones no se actuó para salvar el mayor número de vidas.
Aquel protocolo de la vergüenza, en el que 7.291 ancianos perdieron la vida, digo de la vergüenza para la mayoría de los españoles, porque Ayuso, a tenor de las noticias, no ha tenido la sensibilidad necesaria para hablar con las familias e intentar aliviar un poco sus penas, no, ella está por encima, explicaciones ni una, es más, si se puede ocultar al máximo como se actuó, mejor, a nadie le interesa lo que pasó.
Por mucho que a uno quieran convencerle, no está la cosa para ello, según todos los indicios, en ese protocolo, se decía quien tenía derecho a ser derivado a un hospital y quien no, es más, a decidir cómo muere una persona, si en un hospital con todos los derechos y cuidados paliativos, o en la residencia de cualquier manera, ahora bien, si tienes un seguro privado la muerte sería muy diferente a los demás.
Y no digamos con la frescura que esta señora habló en la Asamblea de Madrid, cuando afirmó que se iban a morir igual, ya fuera en un hospital o una residencia, a esta señora amante de la libertad, la importan muy poco los derechos humanos.
Ayuso no tiene límites, de cualquier hecho hace mofa, aprovecha el accidente del carguero en Baltimore para hacer una comparación con la amnistía, ¿esto qué significa señora Ayuso? ¿ de qué va usted?, no tiene escrúpulos, no demuestra sensibilidad con la gente que ha muerto.
Se pide su dimisión por el último asunto surgido con la pareja, Ayuso tenía que haber dimitido desde el momento en que se utilizó el protocolo de la vergüenza, es más, conviene, según muchos pensamos, que la fiscalía debería actuar por si hay que depurar responsabilidades en la persona de Ayuso.
Aznar y Ayuso, Ayuso y Aznar, tanto monta, son el Trumpismo, el Mielismo, el Bolsonarismo y el Putinmo, todo a la vez, sin desperdicio.
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